PRIMER ASALTO. El Más Grande
Ambos contendientes acuden al saludo incial y a los avisos del árbitro. Foreman escucha en silencio, Ali se la pasa vociferando provocaciones a su rival. Suena la campana, ambos púgiles se encuentran en el centro del ring. Foreman trata de acercarse, Ali lo mantiene a raya con golpes rápidos que no suponen ningún problema. Cuando Foreman consigue acercarse, Ali se cubre el costado derecho y con la mano izquierda agarra la cabeza de su rival para decirle cosas al oído. Las provocaciones no eran solo para la previa del combate sino que serán una tónica habitual. Una escena se repite una y otra vez: mano izquierda de Ali en la cabeza de Foreman pareciendo querer bajársela, como exigiendo que el campeón reverencie a la leyenda.
<<Soy El Más Grande, George. Me debes respeto. ¡Muéstrame respeto!>>